Por: Rosa Rodríguez G.
Publicado en: Tribuna de la Habana, 1ro de febrero de 1984, página 1.
Una hermosa evocación al 31 de enero de 1974, fecha en que el Comandante en Jefe Fidel Castro y el camarada Leonid Brezhnev dejaron inaugurada la escuela vocacional Vladimir Ilich Lenin, constituyo en sí misma la velada efectuada anoche con el latente compromiso de hacer del majestuoso centro educacional una fragua de comunistas.
Julio Camacho Aguilera, miembro del Buro Político y primer secretario del Partido en la capital, presidio la ceremonia con motivo de esta celebración, en compañía de Georgina Leyva, miembro del Comité Central, los integrantes del Buro Ejecutivo del Partido en Ciudad de La Habana Gladys Bejerano y José Maragoto, funcionarios de Educación, dirigentes de las organizaciones políticas y de masa.
En breves palabras Julio Cesar Brismart, director general de la institución, expreso el júbilo colectivo reinante por esta primera década en que todos han aunado esfuerzos por el ogro de la formación integral de sus educandos.
Recordó, entre las vivencias más ricas de estos diez años la paternal ternura con que Fidel; se dirigía a los alumnos en cada visita, su confianza depositada en la generación presente y futura y su anhelo vehemente porque esta sea el modelo de lo que ha de ser la escuela nueva en nuestro país, en memoria del genial conductor de la gran Revolución Socialista de Octubre.
Cantera de jóvenes destacados en el estudio y el trabajo, como parte de su formación, hoy la escuela Lenin cuenta con 253 círculos de interés, trabaja por la mayor calidad en la promoción y la educación formal, ha multiplicado su actividad cultural y deportiva y contribuye con ello a aumentar todo el caudal de conocimientos cosechados por la humanidad en el alumnado, como les señalara entre sus primeros deberes Brezhnev hace dos lustros. En tal objetivo luchan por materializar sus compromisos con el Partido, hacer de este un centro vanguardia de vanguardias.
