Lolita, Cancel, Irving y Collazo en el mundo diferente de los jóvenes y niños cubanos
Por: Gabriel Molina
Publicado en: Granma (La Habana) 3 de noviembre de 1979, pagina 3. il.
Los patriotas puertorriqueños pasaron la tarde de ayer –su segundo día en Cuba- con los jóvenes y niños cubanos y comprobaron que “este es un mundo diferente”.
Lolita Lebrón, Rafael Cancel, Irving Flores y Oscar Collazo visitaron, entre las 3 de la tarde y las 7 de la noche, la Escuela Vocacional Lenin y el Palacio Central de Pioneros “Ernesto Guevara”.
Para los patriotas puertorriqueños fue una sorpresa este nuevo acercamiento con el alma del pueblo cubano. Ellos así lo expresaron. Pues difícilmente podrían imaginarse la identificación tan grande de toda Cuba, representada ayer por sus jóvenes, hacia quienes guardaron una dura prisión de 25 anos.
Puerto Rico es el ala esclava del pájaro. Pero como bien decía Oscar Collazo en su hermoso discurso improvisado, después de recibir las altas condecoraciones cubanas, Martí y Betances eran representantes de una misma revolución. Y los nietos de Martí no lo han olvidado.
Cuando la niña Teresita García, de 13 años y octavo grado, leía con voz emocionada el saludo de la escuela a los patriotas puertorriqueños y vibra más alto para gritar: ¡Viva Puerto Rico Libre!, el ambiente se hacía electrizante. Durante unos instantes Lolita y Teresita se quedaron una frente a la otra, los ojos en los ojos, sin poder decir nada. Teresita bajo la vista y ambas se abrazaron muy fuertemente. Fue una escena tremendamente sentimental.
Los patriotas puertorriqueños venían acompañados por Jorge López, miembro del Buro de la UJC y Freddy Torres, funcionario del Departamento de América del Comité Central. E hicieron también el recorrido Carlos Vélez, presidente del Partido Nacionalista de Puerto Rico, y Nelson Canals, presidente del Comité Puertorriqueño de presos políticos.
Después de saludar al Consejo de Direccion y los trabajadores destacados del pasado curso y escuchar el característico aplauso de la Lenin, la directora del centro, Sonia Romero, explico las peculiaridades y objetivos de la Escuela ante una bella maqueta.
Los patriotas puertorriqueños subieron al tercer piso mientras por los pasillos que se atravesaban, de todas partes, surgían legiones de espontáneos jóvenes aplaudiendo y vivando a Puerto Rico libre. Tres muchachas, junto a la puerta del salón de la maqueta, habían sido particularmente elocuentes. En el tercer pido, se las vio llegar sofocadas a la par de los visitantes. Habían subido por otra escalera y lograron su propósito de llegar a tiempo. Eran Nury Acosta, Mavil Rivero y Haymee Pérez, las tres de 17 años y de duodécimo grado. Le preguntaron a Lolita si estaba contenta y le gustaba la escuela. Lolita les respondió que era de oro y que si fuera joven vendría a estudiar aquí. Las muchachas se sintieron aun más felices cuando Lolita las enganchó del brazo y caminó un buen rato con ellas.
Del moderno laboratorio de física, equipado con aire acondicionado, se paso al taller de la industria deportiva, donde las muchachas cosen a maquina distintas prendas para el deporte.
Rezagado, pude notar a una de las niñas llorando en silencio. Traté de consolarla y saber por que lloraba, pero no podía hablar.
Ya en el salón de Geografía, no podía olvidar a aquella niña. De repente decidí bajar a verla. Ya estaba calmada. Le pregunte otra vez por que lloraba:
-Porque lo que cometieron con ellos fue un crimen. Dijo, y rompió a llorar nuevamente. Otra compañerita explicó que Osnidia Amador, de 13 años, se emocionó así al ver entrar a los patriotas y gritar con todos: ¡Viva Puerto Rico libre! Porque esos presos intransigentes son algo muy grande para ellos.
Como colofón de la visita, Lolita, Cancel, Irving y Collazo fueron designados miembros de honor del Consejo de la Escuela y les impusieron la pañoleta de pioneros y el monograma de la escuela. A continuación, varios grupos de jóvenes artistas de la escuela se fueron rotando con canciones latinoamericanas de distintos géneros. Los momentos más altos fueron cuando Teresita García recitó con gran fuerza expresiva “General de Hombres Libres”, del Indio Naborí. Y ella y otros dijeron “De guajiro a jibarito”, con versos y coros. El gran final fue un gran coro de “Que linda es Cuba”, con Nury Carrasco, de onceno grado, ganadora de un concurso Para Bailar interescuelas, como solista.
En la despedida, el coro de los jóvenes de la Lenin retozaba en la mente con su ritmo de guajira:
“Cuba y Puerto Rico son
de un pájaro las dos alas
reciben flores y balas
en el mismo corazón”.
Lolita Lebrón, Rafael Cancel Miranda y demás independistas puertorriqueños al finalizar su visita a la Escuela Vocacional V.I. Lenin el 2 de noviembre de 1979.